15/12
Comenzamos el año en Zaragoza, apadrinando al Coro juvenil del Colegio Romareda en su primera intervención pública y a escasos meses de haber comenzado a trabajar. Y que mejor manera de cerrar el 2016, que regresar a Zaragoza al lado de estas preciosas voces para interpretar juntos el Oficio de Navidad en el escenario de la Iglesia de San Juan de los Panetes. Esperamos pasar un día muy agradable junto a estos chicos y chicas que trabajan con ilusión el nuevo repertorio. ¡Nos vemos el sábado!
17/12
Un día excelente en lo
climatológico y muy bien organizado al girar todos los planes alrededor de la
Plaza de la Basílica del Pilar. Ensayo matinal junto con la violinista Judith y
la pianista Elena que acompañarían a Marta
en el apoyo instrumental necesario para las obras seleccionadas para este
Oficio de Navidad en la Iglesia de San Juan de los Panetes. Tras finalizar este
primer encuentro, no reencontrarnos con el resto del grupo para realizar una
breve visita guiada por el interior de El Pilar. Una íntima interpretación del Sancta María de Gounod a los pies de la
Pilarica puso fin a esta visita para dirigirnos al lugar convenido para comer …y
en "esencia", diremos, que la comida resultó copiosa y con un ambiente muy
animado y prolongada sobremesa de conversaciones y risas.
A tenor de lo que nos
encontramos en San Juan de los Panetes sus espacios son muy solicitados para
realizar conciertos en su iglesia, por su excelente sonoridad y por la capacidad de sus salas
anexas para distintas celebraciones y festivales escolares. El trajín de
público fue una locura, finalmente logramos llegar hasta los “camerinos” para
enfilar los últimos toques del concierto junto con los jóvenes coralistas del
Colegio Romareda de Zaragoza.
El Oficio de Navidad fue el acto previo al inicio
de la Navidad, participado por alumnos, profesores y anfitrionas del lugar en
las lecturas que hacen referencia a la Natividad de Jesús, alternando con las
piezas musicales. Hora y diez minutos de concierto del que tanto los
participantes como el público salimos del todo satisfechos. Una cena informal
con un muy buen repertorio de canciones fue el preludio de una gran foto de
familia en la Plaza del Pilar, que nos deja el recuerdo de nuestro segundo paso
en 2016 por Zaragoza. El año que viene emplazamos al joven coro Romareda a
visitarnos en Barásoain y dejarnos con tan buen sabor de boca como lo han hecho
al demostrarnos su buen hacer y su espléndida evolución en estos 12 meses.